Un día Gepetto encontró un trozo de madera, el que guardo en uno de sus bolsillos. Mientras caminaba hacia su hogar, tras una larga jornada de trabajo, se preguntaba que podía hacer con aquel trozo de madera, lo veía pequeño e inanimado. Entonces se le encendió la lamparita y dijo: voy a darle vida a esa maderita. Fue así que Gepetto se puso a trabajar, cogio papel y lápiz y comenzó a planificar, proyectar su idea, dibujos, flechas, medidas, notas que iban dando forma a aquello que Gepetto tenía en mente.
Trabajo duro, durante varias noches enteras, serruchando, lijando, probando sobre aquel leño; hasta que por fin llego el momento de presentar su obra, a la cual llamo Pinocchio, un muñeco de madera al que por último coloco 2 tornillos como ojos y dijo: “tu siempre me acompañaras, día y noche estarás y en algún momento vida cobraras”. En ese momento Gepetto ve atravesar en su ventana la estrella fugaz más luminosa que jamás había visto.
Pinocchio y Gepetto siempre juntos estarán y muchas historias vivirán…
Somos Gepetto y hacemos Pinocchios.
http://pinocchios.com.ar/
No hay comentarios:
Publicar un comentario